15 de noviembre de 1959.
Sucede uno de los mayores y brutales
asesinatos a sangre fría en el estado
de Kansas. En ese tiempo, no acostumbraban ver asesinatos así de “fuertes”
porque para la época no esperaban encontrar a alguien con ese tipo de
trastornos, de hecho, fue bastante “innovador” para el área detectivesca. Este
hecho dejó impactada a toda la población de Kansas
city dejándola temerosa y aterrada de vivir en el mismo campo que ellos: los Clutter porque, si a esa buena
familia pudo pasarle lo que les pasó, ¿qué le pasaría a los demás, sabiendo
ellas que han sido más impuras? Estas personas estaban totalmente aterradas
porque en su pequeño pueblo había una desconfianza que no se puede borrar, es
verdad. Lo tomaron de una manera dramática y explosiva en el pueblo, creían que
los Clutter eran dioses, porque tanta pureza parecía irreal en este mundo tan
destruido.
Truman Capote, nuestro escritor y periodista,
realizó esta investigación periodística que le llevó aproximadamente 5 años
(durante todo el proceso), y realmente tuvo contacto con los procesados, les dio el
tiempo de que dieran su “declaración” de los hechos de una forma que se puede
mostrar más allá de un juicio y también la oportunidad de conocerlos y de
alguna forma entenderlos (más en el punto psicológico). Ésta investigación
conlleva al “nuevo periodismo” (género literario) que se enfoca en la búsqueda
investigativa de un hecho real llamada"Nonfiction
Novel" o "Novela testimonio."
Tenemos como protagonistas, obviamente, a la
familia asesinada: Los Clutter; cuyas vidas humildes y prósperas nunca
esperarían un ataque como ese a su familia y a su tranquila comodidad, pero
como dicen por allí: “Nada permanece tan perfecto”. Y a sus atacantes, Richard
Eugene (Dick) Hickock y Perry Edward Smith; dos jóvenes que no tocaban ni siquiera los treinta
años cuando realizaron el ataque. Unos chicos avariciosos corrompidos. No
tenían el derecho, ni siquiera razón, de
expresar su dolor personal con la matanza a
sangre fría.
Profundicemos un poco más:
Los Clutter, una familia que prosperó
mediante al hombre y principal padre de
familia: Herb Clutter que inició totalmente desde los subniveles del prestigio
a una calidad alta en una ciudad como Kansas. Tenía, junto a su familia, una
hacienda llamada: “River Valley” en la cual le iban muy bien los encargos y se
podría decir que era el jefe ideal, la persona ideal. Todo el mundo lo
respetaba (lo admiraban) y él a ellos. Nadie sobrepasaba la línea. Algunos
creían que era sumamente rico, pero la verdad es que todo el dinero lo
monitoreaban mediante cheques, o sea, no llevan efectivo encima cosa que
nuestros ladrones no sabían al tratar de dar ese “gran golpe”, una decepción
que luego llevo a la desagradable muerte de la familia, viéndose como pagados
con cuarenta y ocho dólares por 4 vidas.
Fue una familia Humilde, optimista y amiga
de toda la ciudad de Kansas. No había persona que los conociera y no hablara
bien de ellos. Eran una familia ejemplar, solo se preocupaban de sus cosas, no
era de esas personas con malicia sino que conseguían lo que necesitaban siendo
como son, además, en ese pueblo, por así decirlo, el crimen no era muy común y
menos ver cosas como la muerte de esa familia. Quedaron dos sobrevivientes, dos
hijas mayores. Ya maduras que tenían su propia familia lejos del pueblo.
Perry Smith; chico con infancia traumática,
sufría de bullying, se metía en problemas, sus padres se habían divorciado y
para colmo no eran la mejor imagen para un niño de su edad prematura. La madre
era una alcohólica sin remedio y su padre un imbécil violento. El mayor frustre
de éste personaje es que nunca pudo complementar sus estudios, se sentía de
alguna forma “bruto”, así que se obsesionó con la gramática. Su madre murió en
estado de coma por su descontrol al beber y la mayoría de sus hermanos se
suicidaron. Siempre pensó en librear su sufrimiento mediante el suicidio pero
nunca lo hizo. Como sobrevivientes de esa familia solamente quedaron: el
mediocre de su padre, su hermana y él. Mediante estos traumatismos (poco
después iniciada la lectura sabremos), su estado psicológico no era estable,
así que no diferenciaba el bien del mal porque si lo hubiera hecho, no hubiera
asesinado a toda la familia Clutter, a pesar de que fue un asalto fallido.
Dick: de este personaje no hay mucho que
decir, era más estable psicológicamente que Perry. Pero, su mayor imperfección
era la avaricia. Su familia era clase media pobre, pero siempre tenían que
comer, en cambio, se fue por los malos caminos y terminó encarcelado (por
asaltos), donde conoció al testigo número uno del caso del asesinato de los
Clutter, Floyd Wells; que le contó sobre aquella familia “adinerada” y escuchó
el plan del “gran golpe” de Dick, el cual pensaba Floyd que era pura charla y
fanfarronería.
Es un depravado sexual, eso sí. A Perry le
molestaba que él no pudiera mantener el control de su estado “sexual”. El día
del asalto, decepcionado pero con su “conciencia limpia” (siempre recalcó que
no mató a nadie), dejó que Perry hiciera el trabajo sucio, por así decirlo.
Luego de tener en claro todos estos puntos y
conocido la vida de todos los personajes, nos apegamos a la historia, le
tenemos cariño y eso es lo que busca el escritor, mostrarnos la humanidad
detrás de ese crimen sin sentido. Nos narra en narrador omnisciente, en el
cual, pasamos por todo el trayecto: Su huida del crimen, su detención, su confesión;
al estar encerrados y ejecutados. Muchas personas, la mayoría del estado,
esperaban que se hiciera justicia por ese crimen atroz. Los condenados tenían,
como castigo, la pena máxima (la muerte; ahorcados en Kansas), que fue sucedida
en 1965.
Ahora que ya conocemos los personajes, los hechos, podemos decir que
este crimen fue totalmente innecesario, ¿arriesgarlo todo por menos de
cincuenta dólares? Hay que ser bastante detestable para eso, pero realmente es
que la situación se le salió de control a ambos. Dick: Solamente no paraba de
buscar el dinero sin escuchar las advertencias de Perry mientras que Perry,
luego se concentro en asesinar a la familia (por influencia de Dick). Perry es
el personaje más sensible y femenino o delicado de la novela, al principio no
te imaginas que en su confesión dijera que él solo los mató a todos, tendrías
más suposiciones de que fue el avaricioso de Dick, pero las cosas resultaron
bastante reveladoras al final.
En el final de su camino, luego de la
confesión de ambos, se llevó un largo proceso contra los criminales. No se
pudieron zafar de lo que les venía encima, así que al pasar el tiempo solo lo
aceptaron. Siempre unidos, eso sí, aunque cabe a destacar que Perry no iba a
“soltar la sopa” y quedó sorprendido de que su compañero “el duro”, el que él
admiraba la hubiera soltado antes.
El caso hubiera dado un giro diferente a un
manicomio (en el caso de los traumatismos de ambos y más, obviamente, el de Perry),
lo que pasó realmente es que el doctor no pudo testificar de manera explícita
la situación mental de ambos. Traumatizados, aunque no justificable sus
acciones.
La sociedad es irónica, señores, te crea, te
amolda y luego te destruye. Obviamente no podemos echarle la culpa al destino
de aquella persona que “hace mal” según la perspectiva de la misma. Todo es un
círculo que va y viene, el mundo está roto, tiene algo mal dentro de sí, está
loco, nosotros solo tratamos de sobrevivir a nuestra manera, a nuestra
perspectiva. Lo que pasa en el mundo, o las consecuencias de nuestras acciones
forman ese círculo y no encontraremos a nadie puro, la malicia lo consume en el
momento en que inicia sus primeras palabras.
Abraham Ezequiel Silva Alfonzo (AESA)
Mayo, 2018
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